Todos los residuos al llegar a planta son identificados y pesados en la cabina de control y báscula de pesaje.
Después son descargados en la playa de descarga en donde son preseleccionados por medios semiautomáticos.
Una vez terminada la preselección son introducidos en la tolva vibrante de alimentación para pasarlos al trommel, el cual separa los finos, arenas y tierras.
El resto continúa hasta la zona de sopladores y electroimanes para que todos los impropios de pequeño tamaño y los materiales férricos sean clasificados antes de la zona de triaje.
Ya en el triaje son clasificados manualmente todos los residuos que no sean inertes, es decir limpiar de maderas, plásticos, cartones, etc.
Al finalizar ésta última etapa los residuos inertes pasan a la zona de machaqueo y selección para transformarlos en áridos reciclados, y el resto de residuos son prensados para destinarlos al reciclaje en otros centros.
Los residuos que no traen escombros ni áridos, como en el caso de los industriales, se descargan en otra playa cerrada, para que por medios semimanuales sean clasificados y prensados para su posterior reciclaje.
